Por: Miguel Angel Trujillo

Director de la UNP, Augusto Rodríguez, es investigado por la Procuraduría por presuntas omisiones en la protección de miembros del Centro Democrático. La investigación se intensifica tras el atentado a Miguel Uribe.

La Procuraduría General de la Nación abrió una investigación disciplinaria contra el director de la Unidad Nacional de Protección (UNP), Augusto Rodríguez, por presuntas irregularidades en la gestión de esquemas de seguridad para miembros del partido Centro Democrático. Esta decisión llega tras una queja formal presentada por el director nacional del partido, generando un terremoto político en Colombia. El caso ha generado gran conmoción pública, especialmente tras el reciente atentado contra el precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay.

El director del Centro Democrático, Gabriel Vallejo, denunció la falta de respuesta efectiva por parte de la UNP ante las solicitudes de refuerzo de seguridad para varios de sus afiliados desde el año 2023. Vallejo afirma que se han presentado reiteradas peticiones sin obtener resultados concretos, poniendo en riesgo la integridad de los miembros del partido. Se espera que la investigación arroje luz sobre la gestión de la UNP y las posibles responsabilidades de sus funcionarios.

La investigación de la Procuraduría se centra en determinar si hubo negligencia o una omisión intencional en la asignación y fortalecimiento de los esquemas de seguridad. Se ha ordenado a la UNP entregar un informe detallado en diez días, incluyendo toda la documentación referente a las solicitudes de protección presentadas por el Centro Democrático desde 2023. Este informe será crucial para determinar si se cometieron faltas disciplinarias.

La investigación por presuntas omisiones en la seguridad de miembros del Centro Democrático, en particular ante la reciente amenaza a figuras políticas como Miguel Uribe Turbay, genera un profundo debate sobre la eficiencia de la UNP y su capacidad para garantizar la protección de figuras públicas en Colombia. Las consecuencias podrían ser significativas, incluyendo sanciones disciplinarias para Rodríguez y una reestructuración en la gestión de la seguridad de la UNP.