Por: Bryan Steven Cardona Ciceri

En un momento de gran expectativa y espiritualidad, el Cardenal Luis José Rueda Aparicio de Popayán, Colombia, ha jurado solemnemente en la Capilla Sixtina, marcando el inicio del cónclave 2025 para elegir al nuevo Papa.

El 7 de mayo de 2025, un aire de solemnidad envolvía la Capilla Sixtina mientras el Cardenal Rueda Aparicio, junto a otros cardenales de todo el mundo, preparaban sus corazones y mentes para una decisión trascendental. Este evento no solo es crucial para la Iglesia Católica sino que también pone a Colombia en el foco de la fe mundial.

El Cardenal Rueda Aparicio, conocido por su humildad y profunda fe, es uno de los 115 cardenales electores que participan en este cónclave. Su juramento, pronunciado con reverencia y convicción, resuena como un eco de su compromiso con la Iglesia y sus enseñanzas. "Con la ayuda de Dios y de sus santos, prometo realizar mi deber con la máxima sinceridad," declaró en un momento de profunda introspección espiritual.

Curiosamente, el número del Cardenal en la lista de posibles papables coincide con los 89 votos necesarios para ser elegido Papa, un detalle que no ha pasado desapercibido entre los fieles y observadores. Este hecho ha alimentado especulaciones y esperanzas entre muchos, especialmente en la comunidad católica colombiana, que ve en él un posible líder espiritual global.

La elección de un nuevo Papa siempre conlleva una profunda reflexión sobre el futuro de la Iglesia, y la presencia de Rueda Aparicio en este cónclave subraya la creciente influencia de la Iglesia en América Latina. Su participación no solo es un honor para Colombia sino también un momento de unión y oración para los católicos de todo el mundo. La comunidad católica colombiana, en particular, se siente profundamente representada y orgullosa de su cardenal, esperando que su voz lleve consigo un mensaje de paz y unidad en estos tiempos de cambio.