Por: Maria Camila Gonzalez Mosquera

María José Estupiñán, joven estudiante y emprendedora, fue asesinada en su casa en Cúcuta, justo el día que ganó un caso de violencia intrafamiliar.

El miércoles 14 de mayo de 2025, el barrio El Bosque en Cúcuta se convirtió en escenario de un crimen que ha consternado a la comunidad. María José Estupiñán, de 22 años, fue asesinada en la puerta de su residencia por un individuo que se disfrazó de domiciliario. El asesinato ocurrió pocas horas después de que la Fiscalía emitiera un fallo a su favor en un caso de violencia intrafamiliar, lo que ha llevado a especular sobre un posible móvil relacionado con su expareja.

María José no solo era estudiante de Comunicación Social en la Universidad Francisco de Paula Santander, sino también una conocida emprendedora y modelo en redes sociales. Su expareja, principal sospechoso del crimen, tenía antecedentes por violencia y no ha sido aún localizado por las autoridades. La Policía Metropolitana de Cúcuta está a cargo de la investigación, mientras que la comunidad universitaria y sus seguidores expresan su indignación y dolor.

Según los informes preliminares, el atacante se presentó en su domicilio bajo la fachada de entregar un regalo. Al abrir la puerta, María José fue recibida a balazos, en un acto que la Fiscalía está tratando como un homicidio premeditado. Este crimen ocurrió justo en un momento en que ella comenzaba a ver los frutos de su lucha por la justicia y la seguridad personal.

Este trágico evento no solo ha devastado a su familia y amigos, sino que también ha reavivado el debate sobre la efectividad de las medidas de protección para las víctimas de violencia de género en Colombia. A pesar de los esfuerzos legales y judiciales, la muerte de María José muestra las peligrosas lagunas que aún existen en el sistema de protección. La comunidad y activistas ahora exigen que se tomen acciones más firmes y efectivas para proteger a las mujeres en el país.